El procedimiento fue realizado por Gendarmería Nacional y la Fiscalía Rural Ambiental. Está ubicada en el Departamento de Curuzú Cuatiá.
Las actuaciones en torno a este caso se realizó el jueves 24 de noviembre en la estancia Santa Victorina, en el Departamento curuzucuateño, y estuvo a cargo del Escuadrón N° 7 de Paso de los Libres de Gendarmería Nacional en conjunto con la Fiscalía Rural y Ambiental a cargo del Dr. Gerardo Cabral.
«La firma se instaló sin tener autorización alguna. No hay un control en esto. Uno no entiende cómo se autoriza la utilización de agua en importantes cantidades sin tener en cuenta la sequía», dijo el doctor Gerardo Cabral, Fiscal Rural y Ambiental de Mercedes, al referirse a los procedimientos realizados en el predio productivo que sería responsable de dejar sectores del río Miriñay absolutamente seco por su trabajo irregular.
«No tenían autorización para trabajar. Hubo un manejo irracional del agua, y así secaron el río», dijo Cabral.
La arrocera en cuestión es explotada por una firma de la entrerriana localidad de San Salvador, la cual construyó un terraplén
sobre el rio Miriñay que impedía el normal escurrimiento de las aguas, ocasionando a los campos aguas abajo innumerables inconvenientes, además de destruir toda la biodiversidad del rio al dejarlo seco.
La unidad Fiscal avanzó la semana próxima con las imputaciones por los delitos de Usurpación de Aguas previsto y penado por el art. 182 del Código Penal contra los responsables de este hecho delictivo.
Además de ello se evalúa la posibilidad de un amparo ambiental para salvaguardar la vida acuática del Rio Miriñay, que nos pertenece a todos y cumplir con la manda Constitucional de preservar nuestros recursos para nosotros y para las generaciones futuras.
Este allanamiento lo ordenó el Dr. Martin José Vega, Juez de Garantías, dicha orden la dicto de manera urgente debido a la premura e importancia del caso
